El último desfile de Alexander McQueen en París no ha dejado indiferente a nadie. Inspiración bizantina, algún print digital, pedrería vintage, bordados imposibles… Los medios la califican como un "resumen" de toda la trayectoria creativa del diseñador. Y es que McQueen ha reunido todo su ideario, sus obsesiones, su persona, sus referencias y toda su iconografía en esta colección Prêt à Porter para el próximo otoño-invierno. ¿Lo peor de la colección? La ausencia de su diseñador.
Los famosos "prints digitales" de McQueen.
Una retrospectiva al pasado: Vestidos de inspiración bizantina.
Pictures from Vogue.
1 comentario:
Pues no, no ha dejado indiferente a nadie. Detrás de la colección quedaron los últimos esbozos de todo un genio y el resultado ha sido buenísimo.
Saludos, Isa :)
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